Habíamos
quedado citada la Comisión Permanente para este miércoles a las 12 de
la mañana y se ha reunido con el Director de RRHH, para proceder a la
firma de las parrillas pendientes (Biorreactores, Central
Térmica/Cogeneración y Laboratorio Central). Con las correspondientes a
los dos primeros departamentos, no ha habido problema, otra cosa fue
el calendario del Laboratorio Central. Aquí el Sr. Colio no ha variado
su planteamiento.
En la
información anterior decíamos al respecto: “Por lo que nosotros sabemos
siempre se empleó esta fórmula, que dicho sea de paso, creemos que
resulta beneficiosa para la empresa, pero a veces parece más importante
imponer el criterio propio, aunque sea erróneo, que conservar el
rendimiento… y la calma”. Lo visto hoy confirma la obsesión del
Director de RR.HH, con el disfrute de parrillas en domingo, fuera del
calendario. Lo que desconocíamos es que esta fobia alcanzaba también a
las fiestas.
Con
independencia de comentarios más o menos malintencionados, no estamos de
acuerdo con el Director de RR.HH cuando considera un privilegio el
sistema de disfrute de parrillas en este departamento. No señor, no se
trata de un privilegio, sino de dar una respuesta a una necesidad que
existía en aquel momento y que se cubría con horas extraordinarias.
En
aquel tiempo, hace más o menos 14 años, el personal del Laboratorio
Central trabajaba a jornada normal, lo que no cubría las necesidades que
el control de calidad de la producción requería, lo que obligaba, como
decimos, a la realización de un buen número de horas extraordinarias.
Por ello, quien entonces dirigía el Departamento de Personal (como
vemos su denominación no era tan guai como la de ahora) propuso a estas
trabajadoras una modificación de jornada, que consistía en pasar a la
ya existente y reglada jornada especial, con su correspondiente plus. Y
para aderezar la propuesta, les promete el sistema de parrillas que
hasta ahora han venido disfrutando, que como ya decíamos beneficia a
ambas partes: a las trabajadoras y a la empresa.
Y así
han estado durante catorce años, a lo largo de los cuales, los
respectivos comités de empresa y representantes de la misma han firmado
los calendarios de parrillas, que cumplían esa promesa, todos y cada
uno de los años. Hasta que este año, el actual Responsable de los
Recursos Humanos, que olvidábamos decir, formó parte de aquel acuerdo,
aunque no se acuerda, ha decidido fulminarle, tal vez en un afán de
revancha por la reclamación de categorías de estas trabajadoras.
¿Quién sabe? Por cierto, ¿formará parte de esta política lo del Laboratorio de Celulosa? Ya veremos, aquí tarde o temprano todo se sabe.
PD. Sabemos que el Sr. Colio participó en este acuerdo, lo que no hemos podido confirmar es en qué parte de la trinchera estaba.