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13 febrero 2013

Donde digo “acuerdo”, digo “planteamiento”

A lo largo del lunes, recibimos una serie de informaciones, que no sabemos muy bien si obedecen a una operación de marketing, o se trata simplemente de que el Sr. Diego, tal vez confundiendo el deseo con la realidad, se pasó de frenada y le llamaron al orden. Lo cierto en que la sensación entre los trabajadores de Sniace era muy parecida a la que se da cuando montas un circo y te crecen los enanos. 

Don Ignacio Diego, Presidente del Gobierno de Cantabria, comunica en rueda de prensa, que ha mantenido una reunión con Don José Manuel Soria, Ministro de Industria, Comercio y Turismo, del Gobierno de la Nación, en la que han llegado a un acuerdo por el cual, el céntimo verde para consumo interno, se reducirá de 0,65  a  0,15 EUROS por Gigajulio.
Como es lógico, todos los trabajadores se muestras interesados en conocer los entresijos de dicho acuerdo. A la Secretaría del comité llegan muchas llamadas interesándose por estos aspectos. La prensa no le fue a la zaga, pese a los intentos por hacerles ver que aún desconocíamos los detalles, pero que no era tarea sencilla. Pese a ello, como decimos, los medios de comunicación destacaban el considerable número de empresas afectadas (hasta ese momento solo Sniace se daba por aludida, pero al olor de las sardinas…) El mensaje estaba calando, sobremanera en nuestro caso, pues la repercusión alcanza a casi 400 trabajadores que se encuentran en desempleo.

Nos lo presentaban como un "avance", porque el ministro había aceptado el planteamiento hecho por Diego: “de que los 0,65 euros sólo se apliquen al gas consumido para generar energía que sea vendida a la red, mientras que el gas consumido con el objetivo de generar energía vapor para el consumo interno de la propia fábrica tenga una tributación diferente, concretamente 0,15 céntimos”. Esto venía a aliviar el cargo que suponía el texto inicial de la ley, que era el de aplicar un tributo de 0,65 euros por gigajulio ya fuera a la energía vendida a la red o la destinada al proceso interno de la propia fábrica. Según Diego, lo “acordado” resolvía el 77% del problema que generaba el céntimo verde, con lo que lo consideraba “resuelto “el problema.  Además nos explicaba también, cómo lo habían alcanzado: habían trabajado en el acuerdo en encuentros previos y ahora se abrían nuevas líneas, ya que habrá que esperar a los estudios que lleven a cabo tanto el Ministerio de Industria como el de Hacienda.

Llegada la tarde, casi al ponerse el sol, la realidad se imponía y como decíamos al principio, volvíamos a tener mala suerte. En casa del pobre, dura poco la alegría. El Sr. Diego aclaraba, “no hay acuerdo para rebajar el céntimo verde,  es por ahora un planteamiento" sobre el que confía en que el Gobierno de España dé pronto una respuesta en firme y que esta sea en sentido positivo, ya que, en su opinión, podría hacer que Expedientes de Regulación de Empleo como el de Sniace, sean reestudiados. En apenas unas horas el presidente pasaba de conseguir un acuerdo que “salvaba a la cogeneración de España”, a reconocer que solo era un planteamiento que Soria estudiaría con cariño.

Últimamente los trabajadores de Sniace no estamos teniendo mucha suerte con las declaraciones del Sr, Diego sobre nuestra empresa. El mismo día habíamos leído sus palabras en los medios de comunicación: “Los nueve millones de gasto extra que la empresa calcula pagar con la nueva fiscalidad, para empezar, esos nueve millones no son ciertos”. Ante la pregunta sobre el dato correcto que manejaba el Gobierno de Cantabria, respondió que “la respuesta la tendría que dar Sniace, pero no son ciertos esos nueve millones que imputan a la nueva tributación energética”. Ante tal discrepancia, solo cabe pensar que uno de los dos Presidentes no dice la verdad. Desde UGT pensamos que si el Sr, Diego está tan seguro ¿no debería denunciar a Sniace y su ERE? Y de ocurrir lo contrario ¿no debería el Sr. Mezquita convocar a los medios de comunicación para aclararlo y dejar de hacer declaraciones políticamente correctas?

Dice el Sr. Mezquita, que le faltan datos para evaluar el impacto real, por lo que se remite al desarrollo de un futuro reglamento que lo especifique. Quizás el Sr. Mezquita, necesite algo más, porque si no se han puesto de acuerdo en el cálculo inicial, cómo lo van a hacer en el supuesto que ahora se plantea. En los mentideros de Sniace, que por supuesto nadie confirma, se habla de cantidades sustancialmente menores a ese 77% del problema y, por supuesto muy alejadas de esos nueve millones, sean o no falsos que dice el Presidente de la Compañía.

Las dificultades a la hora de interpretar todo esto, también las avanzaba el propio Sr. Diego en su intervención de la tarde, en base a una "posible interpretación" de la Ley de Sostenibilidad Energética. Pese a decir que el 77% podía estar solucionado, no pudo precisar ni cuándo, ni cómo se concretará el acuerdo que afirmaba haber alcanzado este lunes con el Ministerio de Industria, porque no se han puesto "plazos concretos", pero sí ha pedido al Ministro que "sean lo más breves posibles" porque alguna de las empresas a las que afectan estos planteamientos  ya están padeciendo ERE´s. Y su solución dependerá en buena medida, de la resolución adoptada. El resto de factores que determinarán la resolución del ERE dependen exclusivamente de factores internos: de la propia producción de la planta y de las decisiones a tomar por el Consejo de Administración de la empresa en la que, por desgracia, para nada influye la interpretación que se haga de asuntos relativos a la energía. Con la determinación del Ministerio de Industria "ya se ha resuelto", pese a la revisión que de todo esto, tendrá que hacer el Ministerio de Hacienda
Si él dice que está resuelto, pues vale, pero a nosotros nos parece que con este galimatías, todavía queda mucho trecho por recorrer.

Vivimos un momento extremadamente complejo y delicado, en el que lo que menos necesitamos son protagonismos, ya tenemos demasiados, incluso en nuestras filas. Lo que necesitamos son soluciones y en el más breve plazo posible, Tenía razón el Sr. Diego, cuando nos decía que cada día que pasa perdemos un poco más de nuestros derechos.

Esperemos al balance final para comprobar si se trata de iniciativas constructivas, o están vacías de contenido. Sería imperdonable que no se tratara más que de oportunismo, porque estamos hablando del futuro, no solo de la plantilla de Sniace sino de toda la comarca. 

De momento tenemos que ser prudentes con lo que nos dicen. Cuando lo consigan, los teloneros aplaudiremos… o reclamaremos. 

No te olvides: próxima movilización, el viernes día 15, en la portería de la fábrica