Hoy se ha celebrado la reunión con el presidente de Sniace, a la que también han acudido el Sr. Gómez de Liaño y el abogado D. Alberto Novoa, además del Sr. Colio y el Sr. del Castillo, quien, por cierto, hacía mucho que no participaba en una reunión con el Comité de Empresa, suponemos que porque no le invitaban.
El objetivo inicial del encuentro era ver los pasos que quedaban pendientes y cómo se iban a desarrollar, de cara a la reapertura de la fábrica. Más concretamente, ver las intenciones de la empresa, de cara al próximo 13 de octubre en el Tribunal Supremo, en lo que respecta a la reversión de los despidos, o lo que es lo mismo, volver a ser plantilla de Sniace y recuperar el empleo. Aunque posteriormente se tenían que negociar lo nuevos expedientes.
Este era el planteamiento inicial, hasta la reunión de hoy. No solo porque lo digamos nosotros, sino porque lo dice el acuerdo laboral firmado el año pasado. Ahora esto varia, la empresa se ha presentado hoy, diciendo que pretende cambiar la metodología jurídica, para poder ganar parte del tiempo perdido, “de cara a la redacción de ese acuerdo transaccional que hay que presentar en el Tribunal Supremo”, para que todo esto tenga validez legal.
Qué es lo que aduce la empresa para este cambio, fundamentalmente que se lleva un retraso considerable sobre las pretensiones iniciales que se tenían cuando se firmó el acuerdo laboral en noviembre del 2014. Por entonces, se preveía que la fábrica de Celulosa arrancara a principios de 2015, y Viscocel a final de año. Como la sentencia del Juzgado de lo Mercantil se esperaba para julio y, como sabéis, salió hace unos días, según Mezquita, si seguimos por este camino y la salida a bolsa de la ampliación de capital acumula algún retraso más, parece imposible poder cumplir con que Celulosa arranque antes de final de año. A todo esto habría que añadir el tiempo de negociación de los nuevos expedientes, una vez que se retrotrajeran los despidos.
En qué consiste este cambio de estrategia, respecto al procedimiento previsto con anterioridad. Pues eso es lo que nos han explicado hoy, pero de palabra. La empresa ya disponía de un borrador de ese acuerdo transaccional, redactado por el Sr. Novoa, pero aún no nos lo ha entregado, porque a la empresa no le ha dado tiempo a revisarlo. En cuanto lo hagan, posiblemente este mismo miércoles, nos lo harán llegar. En cuanto lo recibamos, se le pasaremos a nuestros abogados para que lo revisen, ya que, de algunas de las cosas que nos han planteado, nos surgen algunas dudas legales, sobre cómo se pretende hacer.
Presentar al Tribunal Supremo junto con la solicitud de reversión de los despidos, los compromisos de estos nuevos expedientes de regulación de empleo pactados en el acuerdo laboral y la modificación de algunas de las cláusulas suspensivas que contemplaba el acuerdo (unas porque han quedado inservibles y otras porque no son operativas), no debería ser un problema. De todo lo que ha dicho hoy al Comité, la empresa, no se percibe ninguna novedad sobre lo firmado, ya que mantiene las rebajas salariales, reducción de jornada, etc. ¿Cuál es la única cuestión laboral, que nos debería preocupar? LA REFERENCIA HECHA A LA AYUDA DE LOS 800 EUROS, en cuanto a que “se había multiplicado su costo, porque se preveía pagarse a una pequeña parte de la plantilla y ahora es para casi todos y por más tiempo del previsto”. Que tampoco ha dicho que pretenda quitarla. No, no lo ha dicho, pero sí ha dicho “que hay que hay que recalcular y readaptarlo a la situación actual”, eso sí, respondiendo a las preguntas que se le hacían desde esta parte del Comité, porque desde la otra, aparte de sus habituales cuchicheos, poco hemos oído. Pero seriamos unos ingenuos, si no pensáramos que la empresa no va a intentar hacer algo más que recalcular, eso seguro que ya lo ha hecho. Por lo que, por si acaso, ya le advertimos de que si antes era importante para nosotros, ahora es una necesidad imperiosa, y se puede convertir en una “línea roja” para el Comité, si esto tiene trampa. ¿Del resto? que se modifique o se retire la ampliación, los terrenos o cualquier otra cosa de ese tipo, salvo sorpresa y que el documento diga algo distinto a lo que nos han anunciado, no tiene que suponer ningún problema para ponernos de acuerdo.
Como hemos dicho en la asamblea, si se confirman estos extremos en el documento que nos entreguen, al comité no le disgusta el cambio de metodología propuesto por la empresa, "siempre que sea legal y posible". En esto de la legalidad no solo intervenimos nosotros, habrá que contar con la Dirección General de Trabajo, Seguridad Social, SEPE, etc.
En los próximos días nos volveremos a reunir, con objeto de poder presentarlo cuanto antes al Tribunal Supremo. A nosotros, sin haber visto el documento, se nos antoja que no va ser posible hacerlo en fecha, pero trataremos de que sea lo más cerca posible, para evitar problemas. Sobra decir, porque tenemos la experiencia de todos estos meses anteriores, que es muy posible que desde la Administración nos vuelvan a decir que esto no lo ha hecho nadie… que no hay experiencias al respecto… Con lo que esto significa, ya que estas afirmaciones se suelen traducir en que lo van a consultar hasta con los marcianos, y eso es más tiempo. Por eso decimos desde UGT lo ajustado de la fecha.
En cualquier caso, la empresa es la que tiene que readmitirnos y depende de su voluntad, circunstancia que hoy no ha negado. No obstante, el Comité mantiene las movilizaciones: concentración en la fábrica este jueves día 8, de 10.00 a 12.00 horas, y manifestación el viernes 9, a las 19.00 horas, previa asamblea en la que esperamos poder trasladar alguna información del documento que nos entreguen.