15 abril 2011

La tan traída y llevada parada de Viscocel

En declaraciones efectuadas a la cadena SER, por nuestro Presidente, el Sr. Mezquita hace referencia a la solicitud de reunión, por parte del Comité de Empresa, para interesarnos entre otras cosas, por las posibles inversiones. En estas declaraciones, afirma que los representantes de los trabajadores han estado informados de lo sucedido, por la dirección de Sniace. Pero como ya hemos dicho, antes de la parada no habíamos recibido ninguna información que apuntara en esa línea. Hemos de decirle que en las 48 horas anteriores al martes 5 de abril, cuando a última hora de la tarde, la parada de la fábrica era total, las informaciones recibidas por el Comité, eran como mínimo contradictorias. Sólo iba a parase la línea Snia, y se paró todo.
El martes, en una clara situación de desinformación, a la parada de la Snia, se une el comunicado de CC.OO, dando pie a todo tipo de rumores que dejaban en entredicho la versión de lo que estaba ocurriendo. Se apuntaba ya que el problema era mayor de lo avanzado, llegando incluso a hablase de un ERE. Esto desata la imaginación y lleva a que muchos compañeros crean que Sniace está cumpliendo esas amenazas que con gran despliegue de titulares, dan a conocer los diferentes medios de comunicación, tanto regionales como nacionales.
Tenemos claro, sobre todo por lo expuesto en la segunda reunión que mantuvimos con la empresa, que el problema técnico se veía venir desde hacia tiempo, era evidente que el atascamiento de los Biofiltros era importante, por lo que había actuar con determinación y rapidez. Y para proceder a su limpieza, era necesario parar la fábrica en su totalidad. ¿Entonces, porque nos tuvieron casi 24 horas dando una versión diferente, que en principio a nosotros se nos antojaba carente de toda lógica?
Con los datos facilitados en dicha reunión, está claro que el problema se había detectado con anterioridad. ¿Tanto habría costado reunir al Comité antes y consumarse la parada, aunque no se hubiera concretado la fecha exacta de la misma?
La prueba de que aquí casi nadie sabía lo que iba a ocurrir, es que en las primeras horas de la mañana del martes, Servicios Químicos estaba en marcha normal, cuando las líneas de Snia estaban paradas desde hacía casi 24 horas. Pero es que el domingo siguiente, cuando ya llevábamos una semana parados, y faltaban 24 horas para la anunciada puesta en marcha, vuelve la confusión. Todo iba bien, sólo retrasábamos unas horas la arrancada, es decir al martes, que por cierto, era la primera fecha que nos apuntaron. Y en esa estábamos, cuando el lunes día 4, reúnen de urgencia a la Comisión Permanente para comunicar que seguiríamos parados una semana más, porque era necesario para completar la limpieza. En esta reunión, la Dirección de la Empresa explica ampliamente el proceso de limpieza que se produce en la parada de verano, y cómo se desarrolla el descenso en la presión en los biorreactores, que se produce de una manera progresiva a lo largo de los aproximadamente 21 días que dura la parada de verano. Teniendo en cuenta que el nivel de obstrucción alcanzado a estas fechas, es equiparable al que alcanzamos al llegar agosto, poco necesitamos añadir para entender la necesidad de la parada o que una semana no era tiempo suficiente para “desatascar” los biorreactores.
Y esta es la información de la que dispuso el Comité de Empresa, antes, durante y después de la parada, y no otra, como puede entenderse al escuchar las declaraciones del Sr. Mezquita.
Lo que es evidente es que nunca nos habíamos enfrentado a una situación como la vivida ahora en Viscocel, pero de ella debemos sacar alguna enseñanza. No podemos permitir que vuelva a ocurrir, de hecho, en la última reunión ya se apuntó, por parte de la dirección alguna medida tendente a prevenir situaciones como esta. Este es el tema fundamental que nos lleva a enviar una petición de reunión con el Presidente en la que apuntamos, una vez más, la necesidad de invertir en la fábrica de Viscocel.
Ante la novedad y las particularidades de la situación (“atascamiento” de los biorreactores), es entendible la dificultad de los técnicos para tomar decisiones. Pero hay algo en la sucesión de los acontecimientos de esos primeros días, que se nos escapa, y que por supuesto nadie nos va a contar:
Se producen “picos” más allá de lo conveniente; se para la Snia; aparece el comunicado de CCOO que acusa a Sniace de irresponsable y de una supuesta amenaza de cierre, en el recurso presentado ante la Consejería, por la modificación de los parámetros de vertido que afectan a la depuradora... y se produce la parada total de Viscocel.
Desconocemos cuales y cuántos de estos argumentos han llevado a la decisión final, o si ha sido el eco que alguno de ellos ha tenido en los medios de comunicación. Se nos antoja, que aunque se nos desmiente, alguno de ellos ha podido ser determinante.
La parada de Viscocel, ha contribuido a intensificar todo lo que acontecía esos días alrededor de Sniace. Por abrumadora mayoría, casi todos los medios de comunicación han coincidido en el tratamiento de la noticia, para acabar, como casi siempre, mezclándolo todo: sentencias de tribunales; denuncias reales o ficticias; cartas sacadas de contexto y misteriosamente filtradas a la prensa; preguntas sobre la posibilidad de una deslocalización de Sniace...
Esta situación es de sobra conocida para los sufridos trabajadores de Sniace. En esta larga travesía debemos tener claro que: o cumplimos lo que nos impongan, o podemos incurrir en delito ecológico. Eso es lo que Sniace tiene siempre sobre la mesa.  Pero aquí estamos, sobreviviendo, en medio de la mayor crisis económica mundial, padecida en muchísimos años.
La empresa ha presentado recurso ante la Consejería de Medioambiente, en el que solicita, basándose en numerosas sentencias existentes, que se suspenda la ejecución de la resolución administrativa hasta que se resuelvan todas las cuestiones formales y de fondo. Alegando que esta modificación, al no poder cumplirse de inmediato, puede ocasionar perjuicios mayores y en última instancia solicita más tiempo para cumplir con la nueva modificación de la Autorización Ambiental Integrada.
En este recurso, la empresa presenta una buena exposición de motivos y los razona a través de las 28 páginas que lo componen, poniendo en evidencia: “la diferencia entre la propuesta de resolución enviada y la resolución final”. Quizás lo menos comprensible es que después de la exposición legal, aparentemente tan consistente, cuando exponen que solicitan la suspensión de la notificación, no insisten, o las referencias son escasas, sobre los motivos legales expuestos con anterioridad y si inciden sin embargo, en las consecuencias que pudiera acarrear la parada de la actividad de la fábrica: se perderían clientes, peligrarían los puestos de trabajo, tanto directos como indirectos (para ello adjuntan los famosos TC2).
Hasta aquí el relato de lo sucedido. Ahora parece que algunos siguen interesados en agitar la situación, de mala manera en nuestra opinión. Nosotros, de momento lo dejamos aquí. Hemos aclarado la parada de Viscocel y hemos explicado lo que se nos explicó. ¿Hemos sido unos ingenuos? Tal vez nos hayan engañado, pero quienes seguís nuestras informaciones sabéis que contamos lo que nos cuentan, y siempre damos nuestra opinión al respecto.
Más tarde explicaremos nuestra postura ante las graves acusaciones, bastante alejadas de la realidad y de la verdad, que vierte CCOO sobre el resto de sindicatos que no hemos alcanzado la “gloria” como ellos. No somos capaces de entender como dicen lo que dicen, salvo que hayan sufrido algún tipo de insolación.  
En los siguientes enlaces podéis acceder al recurso presentado por Sniace, y al resto de la documentación que ha dado origen a toda esta polémica y que están en la web de la Consejería de Medioambiente. Es un poco farragoso por el número de páginas del recurso, en las que se acumulan referencias a sentencias, jurisprudencias, Leyes y Decretos leyes. Pero con un poco de paciencia se puede leer y entender un poco mejor la situación.