30 abril 2014

El Comité entrega su propuesta de negociación.

De acuerdo con el compromiso adquirido en la Audiencia Nacional, el Comité ha entregado a la empresa la propuesta que ha elaborado para alcanzar un acuerdo en el plan laboral. Llevamos siete meses insistiendo en que sin dicho plan lo demás es imposible.

El acuerdo tomado en la AN (al juicio no acudió el FOGASA), decía lo siguiente, “Concedida la palabra por la Secretaria Judicial a la parte demandada se solicita la suspensión al estar en condiciones de ofrecer y negociar con la empresa una nueva propuesta de acuerdo que se aproxime al plan de viabilidad presentado por la compañía. Ante tal manifestación la empresa accede a solicitar a la Sala la suspensión conjuntamente con la parte demandada. La Secretaria, visto lo manifestado, acuerda la suspensión de las presentes actuaciones, señalándose corno nueva fecha de juicio el día 3 de Julio de 2014 a las 9: 30 horas para la celebración del acto de conciliación y, en el mismo día, seguidamente para la celebración del juicio, de no haber avenencia en el primero, quedando citados los comparecientes en el presente acto. De todo lo cual se extiende la presente que leída y conforme es firmada por los asistentes, conmigo la Secretaria Judicial. Doy fe”. 

Como explicamos en la asamblea celebrada a la vuelta de Madrid, esto hay que entenderlo en el marco del actual Concurso de Acreedores. Los Administradores nos recomendaron que lo hiciéramos pronto y que “nos ajustáramos, para negociar el pacto laboral, a que se cumpla el requisito de que no aumente el pasivo de la compañía”. Es decir, dibujaron claramente la hoja de ruta a seguir: eso, o todos despedidos. Dicho de otra manera, debemos ajustarnos a la cantidad total que se contempló para los despidos.

Para poder concretar estos aspectos, el pasado viernes cuando aún estábamos encerrados, solicitamos el inicio de las negociaciones con el Sr. Mezquita, quedando fijado para hoy el primer encuentro.

Por lo tanto, hoy nos hemos limitado a la entrega de dicha propuesta, cuyo eje central son las jubilaciones una vez cumplidos los 63 años, mediante una póliza con una compañía de seguros, en la que entrarían todos los que al 31 de diciembre tengan cumplidos los 58 años. Su tramitación llevará tiempo, es decir, una vez que lográramos alcanzar el acuerdo con la empresa, nos quedaría un largo peregrinaje por las Administraciones, tanto la Regional como la Estatal, además de que los Administradores Concursales acepten los términos del acuerdo, ya que continúan resistiéndose al acuerdo, por el tema de la Reforma Energética y sus repercusiones sobre Sniace. Con el acuerdo alcanzado, tendríamos que volver a la Audiencia Nacional, para retirar el juicio de manera definitiva (ahora solo está aplazado). Para entonces, deberemos tener encauzados los temas que esta situación ha generado, en lo que respecta tanto al SEPE, como a la Seguridad Social, porque es necesario que nadie recurra el acuerdo que se presente en la AN. Será entonces, cuando nos den vía libre para la negociación de los nuevos ERTEs, lo que añadirá un mes más, al tiempo transcurrido.

Todo este proceso lo hemos explicado muchas veces durante estos siete meses que llevamos despedidos, ya que fue entonces cuando comenzamos a elaborar esta iniciativa, que es muy compleja desde un punto de vista legal y administrativo por lo novedosa. Pero insistimos, si todos ponen de su parte, es posible. Cuando los temas estén más avanzados y se vayan despejando las incógnitas relativas a la readmisión de la plantillas, se harán reuniones específicas con los diferentes afectados, pero de momento no hay nada acordado.

Nos queda por delante un largo periodo y, hoy por hoy, lo prioritario es la vuelta de todos, ya que este y no otro será el punto de partida para poder desarrollar el resto del plan. Siempre, claro está, con la espada de Damocles de la Reforma Energética, pendiendo sobre nuestras cabezas, ya que se diga lo que se diga, este es el aspecto que más parecía preocupar a los Administradores, en la reunión del pasado jueves, y no tanto que nos pasáramos “algo” en el coste.