09 enero 2014

Crece la incertidumbre sobre la reunión con la empresa

Aprovechando la presencia en la fábrica para realizar los trámites correspondientes a las gestiones que afectan a los mayores de 55, años y ante la ausencia de noticias sobre la propuesta que nos había hecho la empresa, de celebrar una reunión para tratar de los aspectos del plan de viabilidad, que debían presentar a los Administradores Concursales, se puso en contacto telefónico el secretario del comité con el responsable de RR.HH, para interesarse por dicha reunión, ya que ayer se había trasladado a Madrid junto al Sr. Castillo y el Sr. Payno, para mantener una reunión del Consejo de Dirección de Sniace, del que forman parte. Nuestra sorpresa fue mayúscula, ya que su primera respuesta fue que no le constaba que esa reunión, que nosotros venimos dando como un hecho, estuviera comprometida por la Dirección de Sniace. Resulta sorprendente que después de varias semanas hablando de ella y publicándose en la prensa, nos dijera hoy que lo “desconoce”. Lo hemos repetido en multitud de ocasiones tras el viaje que realizamos a Madrid, para entrevistarnos con los Administradores Concursales y con la propia Dirección, pues fueron ellos quienes nos lo propusieron.

Por si esto no fuera suficiente motivo para generar todo tipo de incertidumbres, le dice al secretario del comité, e insiste en ello, “que tampoco le consta que la empresa se haya comprometido con nosotros a negociar ningún aspecto del presumible plan de viabilidad”. Continuamos sometidos inexorablemente a la famosa Ley de Murphy: cualquier situación por mala que sea es susceptible de empeorar.

Inicialmente no dábamos crédito a lo que estábamos escuchando, aunque suponemos que era el papelón que le tocaba hacer hoy. Aprovechando que estábamos casi todos los integrantes del comité en la fábrica, nos trasladarnos a su despacho, para tener confirmación de estos extremos, que nos decía por teléfono. No fuera a ser que luego resulte que una vez más le habíamos interpretado mal. Ya llueve sobre mojado con la tomadura de pelo de las prometidas reuniones”, primero el Sr. Liaño y ahora parece que le ha tocado al Sr. Mezquita.

Pero no habíamos entendido mal. Ya en su presencia, nos confirmó sus manifestaciones, por lo que le solicitamos que se pusiera en contacto con el Sr. Mezquita para que le ratificara si habría o no reunión. Así lo hizo, aunque tampoco aclaró mucho la situación, más bien vino a confirmar las dudas existentes en el comité, en cuanto a sospechar sobre las verdaderas intenciones de la empresa, ya que si bien no negó que dicho compromiso existía, lo fijó para finales del mes de enero, no sin antes advertirnos que no esperemos “ningún cambio sobre lo presentado en septiembre en el Orecla”. Lo que viene a confirmar el carácter que unos y otros dábamos a la reunión y el papel que presumiblemente íbamos a tener los trabajadores en el plan de viabilidad.

El comité tiene una sensación clara: es muy probable que para la empresa solo se trate de un acto premeditado de retraso, que no va más allá de un aquí te pillo aquí te mato, pero seguimos sin ningún compromiso sobre la fecha real de celebración, más allá de ese comentario genérico de que a finales de mes y con la posibilidad, cierta, de que al final el encuentro nunca se celebre.

Es más que evidente que estamos ante una estrategia por parte de la empresa, que haría coincidir esa fecha, aproximadamente, con el juicio previsto en la Audiencia Nacional para el 10 de febrero. Da la impresión de que nos están anunciando que no tienen mucha intención de contar con nosotros. Más bien de esperar a que los despidos sean un hecho, lo que haría irreversible la situación.

Ante la gravedad de los hechos, el comité ha decidido, con carácter de urgencia, reunirse mañana a las 10:30, para planificar las movilizaciones del mes de enero, que comenzarían la próxima semana.